miércoles, 2 de abril de 2014

Punto y final. Punto y seguido

HOW I MET YOUR MOTHER – Última temporada


Spoilers sobre el final de la serie a cascoporro

Y Ted conoció a la madre. Y la serie, que se llamó How I met your mother definitivamente se quitó la careta para reconocer lo que todos sabíamos, que en realidad era How I love your aunt Robin. Que al final Ted termine con Robin es consecuente con lo que la serie ha contado. La madre no era más que un macguffin. El final no tramposo. Lo que es tramposo es el título de la serie. Tras tanto marear la perdiz, incluso hasta la penúltima semana con el amor entre Ted y Robin, el final no podría ser otro. Por ese lado, cero sorpresas, porque además ya nos habían insinuado en uno de los capítulos anteriores que la madre no estaría en la boda de su hija. La muerte. Una muerte que han tratado de una forma muy banal. Ahora entiendo que los King quieran mostrar el tratamiento de la muerte de otra forma en The Good Wife. En HIMYM fue tratada con tacto y gracia cuando murió el padre de Marshall, en cambio en esta ocasión, la ventilaron con una mini-secuencia en un hospital. Como quién se quita una pelusa.

El final de HIMYM es dos cosas a la vez, por un lado indignante, por el otro, jodidamente emotivo. Lo que genera muchos sentimientos encontrados. Dos son las cosas que me indignan, además de lo del título que si no lo decía reventaba. En primer lugar, ¿cómo pueden pasar más cosas en 40 minutos que en 9 temporadas? ¿por qué no se tomaron toda esta temporada para contarnos todo esto, para explicarnos por qué no funcionó el matrimonio de Robin y Barney, como Robin se alejó del grupo, como Ted formó una familia, como su mujer murió y al final como volvió a Robin, o más bien Robin a él? Y en segundo lugar, una crítica más de fondo, ¿por qué Barney? ¿por qué? Si ya tenían planeado que al final Ted volvería con Robin (cosa que sabemos por las secuencias rodadas con los hijos al inicio) ¿por qué metieron a la serie en el berenjenal de la relación entre Barney y Robin? ¿Son conscientes de que por el camino sacrificaron a Robin y estropearon a Barney? Parte de la culpa de que las 4 últimas temporadas hayan sido un quiero y no acabo de poder es de que dinamitaron el statu-quo del grupo con esa relación, de que Barney que era el personaje icono pasó de ser legen-wait-for-it-dary a ser un pelmazo que se movía a trompicones.

Por otro lado, mentiría si no dijera que los últimos 10 minutos de la serie me los pasé al borde de la lágrima. Uno, a mí me gustaba HIMYM pero no soy ningún talifán. Dos, nunca lloro con películas o series. Así que sí, esos 10 minutos finales me emocionaron mucho. Allí estaba yo, entre la indignación y el amor. La secuencia de Barney con su hija es desde luego preciosa, y a partir de ahí todo es una catarata de sentimientos. Unos sentimientos que no justifican todas las tomaduras de pelo y las trampas y los errores cometidos. Ojo. Pero que al final me dejaron un buen sabor de boca. Sí, me metieron el palo, pero ¡qué cara de buena persona tenía el atracador!


BROOKLYN NINE-NINE – Primera temporada


Hasta pronto

Si esta temporada cierra una ilustre veterana como HIMYM, podemos alegrarnos porque después de un par de años de estrenos muy flojos, por fin las networks han parido una sitcom buena de verdad (y alguna otra como la moribunda Trophy Wife o hasta la simplona Mom, que no están nada mal), de la fábrica de The Office y sobre todo Parks and Recreation, llega Brooklyn Nine-Nine, una sitcom ambientada en una comisaría, con un chico SNL como protagonista, Andy Samberg (te quiero… mucho) y un reparto que funciona como un reloj. Más allá de los gags y las tramas que funcionan  muy bien, es justo el maravilloso grupo de personajes que la sustentan, lo que hace que estemos ante una comedia muy divertida y dulce. En B99 no tiran de humor inteligente, ni irónico, es una serie bastante más blanca de lo que podía ser The Office, pero funciona, es emotiva, graciosa, maneja los chistes de siempre con mucha inteligencia y tiene un reparto que ha creado una gran dinámica grupal.

Ha tenido la suerte, frente a The Office y Parks and Recreation que tuvieron unas primeras temporadas muy cortas, de haber contando con una tanda inicial de 22 capítulos, antes del parón de navidad el humor y los personajes estaban perfectamente definidos, y tras su regreso de las vacaciones con dos Globos de Oro (Comedia y Actor de comedia) bajo el brazo, ha firmado una racha de una estabilidad pasmosa. Sin un solo capítulo malo. No tengo problema en decir que quizás haya sido la sitcom del curso que más he disfrutado y una de las mejores de esta temporada (ahí ahí con la siempre solvente Modern Family, la siempre esquizofrénica Community con el regreso de Harmon y una Parks and Rec un poco alicaída).

Unir casos policiales con humor, era una mezcla que podría haberse venido abajo fácilmente, pero han sabido encontrar el punto adecuado, los casos al final no son más que una excusa para tejer el amor entre los personajes y de nosotros para con ellos. Hablando de amor, las dos tramas románticas a largo recorrido de la comisaría han sido manejadas con gracia, y sobre todo la de Peralta (Samberg) y Santiago (Melissa Fumero) ha alcanzado cuotas de riquiñez que no veía yo desde los Leslie y Ben pre-boda de Parks and Rec. La relación odio-amor entre los protagonistas es una constante clásica en las sitcoms (y en muchos dramas también) que lo han heredado de las scrawballs que se movían a través de esa dinámica. El problema para el género surge cuando esa relación amorosa se convierte en el centro de la serie y es final e irremediablemente consumada. Que se lo digan a New Girl, por ejemplo. Aquí, están sabiendo mantenerla en segundo plano, con lo cual no generan en el espectador la necesidad de la consumación, lo cual alterará la dinámica entre los personajes.

Habrá que ver como progresa el año que viene, pero Brooklyn Nine-Nine ha puesto las bases para ser una serie de la que si la audiencia le da la oportunidad, hablaremos con mucho cariño cuando termine, sin polémicas, no como con HIMYM. Y así, se cierra el círculo. Bueno no, no puedo irme sin decir que además de las dosis de dulzura y sonrisas que me ha regalado B99 todas las semanas, lo que más me ha gustado son los interminables (y malignos) one-liners de esa gozada de personaje que es Gina (Chelsea Peretti pide a gritos una nominación al Emmy). El cinismo está infravalorado.

El manta-affaire de Gina, uno de sus grandes hits

4 comentarios:

  1. Ted era especialista en dar mil rodeos para contar cualquier anécdota. Le daba importancia a temas banales y contar como de pasada temas importantes. Así que el desenlace (y en gran medida la serie al completo) fue consecuente con la forma de narrar de su protagonista. Lo mismo con los giros finales: siempre nos hacían creer que pasaba X para acabar ocurriendo lo contrario.

    Mucha gente considera que habría sido mejor darle una temporada a todo lo que ocurre en la finale, pero precisamente es tan efectivo por estar condensado. Transmite perfectamente la sensación de que el tiempo se escurre (y más en contraste a un fin de semana dilatado a lo largo de los 22 capítulos previos), no hay vuelta atrás.

    El desgaste de la dinámica del grupo a lo largo de una temporada habría sido muy deprimente y hasta cansino. ¿Qué cuentas si la clave es que ya entre ellos solo tienen una o dos anécdotas al año?

    A mí me pareció un final redondo, la verdad. Solo hubiera cambiado un detalle: para darle más trascendencia a la muerte de la madre (de hecho hasta que la hija habló, dudé si estaría viva o no), habría hecho que Robin se reuniera con el grupo para el funeral de Tracy, no para la boda. Disculpándose por haber faltado en las ocasiones anteriores y explicando que la madre siempre insistía para que acudiera.

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    1. Sí, en lo de la forma de narrar y los giros estoy de acuerdo, a mí también me pareció un final consecuente pero en lo otro ya no estoy tan de acuerdo, creo que el mensaje de que el tiempo hace que nos distanciemos hubiera quedado mucho más claro usando toda la temporada, así ha quedado a trompicones, como hecho a desgana, y creo que es un mensaje interesante, sin duda hubiera sido una temporada triste pero del drama se puede sacar mucha comedia, The Office tuvo una recta final muy triste pero a la vez tuvo muy buenos gags. Lo que no me gustó sobre todo es sentir que me forzaron a que me gustaran Robin-Barney cuando ellos sabían que no iba a ir a ningún sitio, ese juego que sí que no, me parece muy tramposo y que jodió mucho la serie. Pero eso, que me quedo con buen sabor de boca porque el final me pareció bonito, muy dulce, muy sentido, aunque no fuera el que yo hubiera hecho, y ahí también está parte de la gracia supongo jajaja :)

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  2. Pues a mi me gustó, la temporada 9, más que el cadáver que venían dejando las temporadas anteriores. No tengo ni puta idea, pero me gusta como juegan con el tiempo contando en 23 episodios un fin de semana. Un fin de semana que marca un nuevo comienzo de unos hechos que marcará al grupo los años siguientes. El hecho de contar en 10 minutos los años siguientes también puede implicar que ya no se ven tanto por lo que las anécdotas son más cortas. Me gustó porque me tocaron la fibra, conseguí reir y llorar, no soy de lágrima fácil, en un período de tiempo muy corto y, ¿quién no deseaba que Ted apareciese en el piso de Robin con la trompeta azul para poco menos que hacer un "naked man" si no literal, de su alma hacia su gran amor como todos sabíamos que era la popstar canadiense?
    Para mí le han dado un final muy digno, enseñándonos que en las horas más oscuras siempre queda esperanza de mejora. Eso sí, "a nai" se merecía que hablasen un poco más de su pasamiento. Sabemos que murió enferma gracias a un frame en el hospital, pero no sabemos ni de que murió, tifus, gripe aviar, coagulación de semen en el cerebro vía oral...
    Gran post luigi

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    1. Sí, a mí también me gustó más esta temporada que las anteriores, y lo de meterlo todo en un fin de semana fue muy valiente y creo que les salió bien, sobre todo la primera parte de la temporada, después de que resolvieran la crisis de Marshall y Lily (Thanks Linus!) se me hizo un poco más pesada la estructura.
      Lo de la trompeta azul fue un <3 muy grande, jajajaja viva el naked man, y sí, fue un gran momento final, perros (animales) y perro (peluca) de Robin incluidos.
      En cuanto a la muerte digo claramente:
      ¡Coagulación de semen en el cerebro vía oral! ¡Coagulación de semen en el cerebro vía oral! ¡Coagulación de semen en el cerebro vía oral! (cual Homer clamando por: https://www.youtube.com/watch?v=M0Ql7nDiq8Q)

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